Aparte de todo lo que significa este día que nos celebra como seres valiosos para el mundo, y que mantiene despierta esa llama para seguir luchando contra la discriminación, la violencia, un salario igualitario, y hasta el derecho a la educación para ciertos países; el día de la mujer debe ser para recordarnos que somos hermanas, y que debemos evitar juzgarnos unas a las otras, criticando la forma de actuar, de vestir, de pensar de otras mujeres, sobretodo si la crítica no es constructiva. No sabemos ni sentimos lo que pudo haber pasado aquella mujer que juzgamos para vivir como vive, ser como es o actuar como actúa, si no hace daño a nadie debemos dejarla ser y centrarnos en nuestro propio ser. Lo más importante es vernos a nosotras mismas, ver quienes somos, que queremos en la vida, que queremos aprender, que queremos proyectar, todo con honestidad, transparencia, y realizando cambios necesarios para elevar nuestro conocimiento, nuestros sentimientos, y lo que sea necesario elevar. Esto es lo más poderoso y revelador que podemos hacer en nuestras vidas, y eso iluminará cualquier lugar en donde nos encontremos. Si queremos ver un cambio en como el mundo nos ve, si queremos luchar para conseguir cosas más grandes, empecemos siendo el cambio, empecemos a respetarnos y a ser amables entre nosotras. En el mundo falta mucha compasión, seamos ejemplo de eso, pequeños gestos de bondad son el inicio de grandes progresos. No debe ser difícil ya que como mujeres tenemos una gran ventaja, y es tener la capacidad para abrir nuestro corazón y amar sin límites, nunca lo olvidemos.
Feliz Día a mis hermanas de corazón grande!
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