viernes, 24 de octubre de 2014

LA FIEBRE Y EL USO INDEBIDO DE ANTIBIOTICOS EN LOS NIÑOS


Esta entrada la escribo dedicada a los padres y los cuidadores en general de mis pacientitos. Todos los días en la consulta me llegan familiares muy ansiosos por el aumento de temperatura en la piel de sus pequeños, y es entendible, ellos son los seres más importantes del mundo para ellos, y el sólo pensar que están presentando una enfermedad que pueda afectar su vida los llena de temor y angustia.  Es por eso que cuando me llegan con esos rostros de preocupación me enfoco en comunicarles que la fiebre NO ES LA ENFERMEDAD,  sino es una gran suerte contar con ella, ya que nos avisa que algo está sucediendo y a la vez demuestra que su bebé cuenta con un armamento de soldados (llamado sistema inmunitario) que está luchando contra aquel agente causante de su afección.

Eso por un lado, por otro lado está la creencia de que la fiebre es causada por una INFECCIÓN, y al decir infección en seguida se asocia con el uso de un antibiótico, es por tal causa que también tengo muchos padres que le han dado "la amoxicilina" antes de asistir a la consulta porque la fiebre está "altísima", por lo que concluyen de que seguramente es una infección fuerte y hay que combatirla.  Esto es un error muy grande y peligroso también. Antes que nada debemos tener claro que una infección significa "invasión a nuestro organistmo de un agente biológico externo"  eso quiere decir que no solamente se limita a las bacterias, sino también a los virus, parásitos, hongos.  Por lo que hasta que el doctor no revise al niño y le dé su diagnóstico (es decir la causa probable o definitiva de su enfermedad), no hay que dar antibióticos a ciegas, simplemente controlar la fiebre hasta poder llegar a la consulta o hablar con su médico. 

Los antibióticos son para curar infecciones causadas por BACTERIAS y la UNICA persona que puede prescribirlos es su médico, NADIE MÁS.   Y volviendo a por qué es peligroso dar antibióticos a un niño sin conocer realmente la causa de la fiebre, hay algo llamado RESISTENCIA BACTERIANA ADQUIRIDA que se produce por el uso indebido de antibióticos, esto sucede porque cuando das un antibiótico a un niño sin la dosis, frecuencia y duración adecuada, lo que estás haciendo es ayudando a que las bacterias que alguna vez eran susceptibles a ese medicamento, empiecen a mutar (algo asi como los X-MEN)  y se hagan más fuertes, por lo cual, en el momento en que estas causen una enfermedad en su hijo, no podrán ser aniquiladas con ese antibiótico en particular y se necesitarán antibióticos más fuertes. Y esto último es otro problema, porque ya no se están creando nuevos antibióticos como antes, por lo que si seguimos abusando llegará un momento en que no tendremos que medicamento darles porque ya las bacterias mutantes serán resistentes a todo lo que el ser humano ha sintetizado para protegernos, y no creo que querramos regresar a la Edad de Piedra.  En todo caso si necesitan más información sobre esto o tienen alguna duda pueden leer más sobre este tema en la página de la OMS que les pongo aquí.

Ahora, tenemos a un niño con fiebre, a veces no contamos con termómetro pero lo sentimos caliente, ¿cómo la controlamos?  Siguiendo estos 4 sencillos pasos:  
A:  Alimentación suficiente y saludable, lo que el niño tolere, en pocas cantidades y varias veces al día si es necesario.
B: Bebidas, aumentar ingesta de líquidos al doble de lo que tomaba normalmente, observar que orine adecuadamente. 
C: Cuerpo en ambiente fresco, poca ropa, baño tibio, paños tibios (nada de bañeras repletas de hielo que lo único que hacen es causarle un peor malestar a su niño).
D: Doctor, llamarlo y/o acudir a su consulta en caso de fiebre muy alta y/o acompañada de otros síntomas como vómitos, diarreas, tos, dolor. 

La fiebre puede llegar a deshidratar por lo que es muy importante el punto B de Bebidas, ya que al aumentar la ingesta de líquidos se previene la deshidratación y eso a su vez ayudará a disminuir la temperatura. Es también importante tener un termómetro para poder tener un control de la temperatura, si bien la mano de los padres para tomarla es respetable, no es completamente seguro para saber que tan alta es la fiebre, con el termómetro se tendrá un mejor control y se puede realizar las tomas de 3 a 4 veces al día y apuntarlas para posteriormente comunicarlas al pediatra. 

No olvidemos que la comunicación es vital para ayudar a sus pequeños, no nos preocupemos tanto sino ocupémonos actuando bien informados de lo que estamos haciendo para ayudar al niño a salir de esa crisis sin complicaciones, la tarea está en ustedes junto con la guía de su pediatra de confianza.